Si algo ha dejado y está dejando patente la crisis sanitaria que venimos sufriendo este 2020 es que la conectividad digital es fundamental. El teletrabajo, el comercio por Internet o la formación online nos han permitido mantenernos a flote, seguir en contacto, y por ello, más que nunca, es imperativo garantizar que esta conectividad se extiende a todos los territorios y sectores. La universalidad de Internet debe hacerse realidad porque es la base sobre la que debe cimentarse el cambio de modelo social y económico que estamos viviendo.
A lo largo de la historia, los grandes momentos de crisis han sido la antesala de oportunidades económicas o científicas que han generado un gran impacto. Ahora estamos viviendo uno de esos momentos, una de esas situaciones que hace tambalearse a la sociedad, que agita el sistema y de la que nace algo nuevo.
Y ese algo nuevo es un modelo en el que innovación y sostenibilidad toman el mando. En ese algo nuevo surgen oportunidades para que sectores o entornos que estaban estancados, vuelvan a coger impulso. La industria y los territorios rurales se encuentran actualmente en esta situación y ambos están tomando medidas para mejorar su posicionamiento.
En Cantabria y entre otras, dos organizaciones son ejemplo de esta filosofía de superación: Cinbesa, el Clúster de la Industria del Besaya, y Territorio Rural Inteligente. Ambas han decidido además, alinearse en este objetivo común y firmar un acuerdo de colaboración que se ha materializado recientemente.
Este vínculo que nace entre ambas organizaciones es muy importante en tanto que la industria es un sector que necesita reubicarse en Cantabria y se encuentra en un momento clave de desarrollo, al igual que los entornos rurales.
Grupos operativos trabajarán conjuntamente para aportar ideas desde la perspectiva de la innovación
Y sabiendo que en este proceso digitalización e innovación son la llave que abre casi todas las puertas, este acuerdo tiene como meta «impulsar actuaciones que, en línea con los fondos europeos, generen nuevas oportunidades para la industria y otros sectores como el turismo, la agroalimentación, la construcción, el comercio y los servicios». Ambos proyectos buscan aunar fuerzas para explotar los recursos que tiene la comarca del Besaya y generar un modelo de gestión que potencie un entorno con las infraestructuras y servicios necesarios para que en él se cree empleo, se impulse el emprendimiento, se atraiga talento y, en definitiva, se cree el marco óptimo donde resulte atractivo vivir y trabajar.
Las dos organizaciones coinciden también en que el desarrollo de estas soluciones eficientes pasa por un sistema de trabajo transversal, donde empresas, organizaciones y asociaciones actúen de manera coordinada. Un sistema para el que ambas entidades consideran efectivos los grupos operativos, que son agrupaciones de organización y expertos que trabajan conjuntamente sobre una determinada cuestión para resolverla desde la perspectiva de la innovación.
Dentro de estos grupos, la transferencia de conocimiento será un elemento clave de su funcionamiento, puesto que deben centrarse en intercambiar ideas, debatir resultados, analizar oportunidades… Todo ello en el marco de un ciclo de reuniones con grupos operativos y sobre proyectos innovadores que, desde ambas organizaciones, ya se está impulsando. Fruto de esas reuniones se espera generar una serie de propuestas concretas, modelos de actuación y financiación que puedan servir como hoja de ruta para aplicar en la comarca del Besaya y otros municipios de la región.
Cinbesa, una organización transversal comarcal
A comienzos de este verano se presentaba en la Cámara de Comercio de Torrelavega Cinbesa, el primer clúster industrial de la comarca del Besaya. Con el objetivo de ser el ‘germen’ que produzca un cambio productivo en Cantabria, esta organización sin ánimo de lucro busca que esta zona tradicionalmente ligada a la industria crezca en términos de innovación, digitalización, reindustrialización e internacionalización. Y poniendo el acento en estas áreas, la meta final no es otra que aumentar la productividad y eficiencia de las empresas asentadas en la comarca, un proceso que actualmente está inevitable y estrechamente ligado a la transformación digital.
La agrupación pretende ser también una herramienta de comunicación y actuar en dos direcciones. Por un lado, como interlocutor con las distintas administraciones; y por otro, como un espacio desde el que favorecer la cooperación entre empresas que tengan intereses comunes, de manera que este clúster sea un punto de encuentro para intercambiar experiencias a nivel profesional, jurídico y económico.
Y para lograr cumplir este doble papel para las empresas industriales del Besaya, Cinbesa se presenta como un «entorno de trabajo abierto, representativo, colaborativo, proactivo, comprometido e independiente».
Este es un proyecto que ha nacido en el seno de la Cámara de Comercio de Torrelavega y que ha ido fraguándose a lo largo de 2019. Desde la institución, defienden que la nueva agrupación tiene como principal elemento distintivo la transversalidad, ya que en vez de operar en torno a una rama determinada, su actividad va a extenderse a todo el sector industrial, buscando conseguir que su aportación al PIB regional supere el 20%.